Salimos del mundo donde las serpientes cambiaban de forma y cruzamos el puente, el túnel, llegamos hacia un espacio rocoso,que tenia un olor en particular. todo el ambiente olía a carne quemada, vimos muchas personas envueltas en bolas de fuego que desgarraban su carne y se quemaban después de ser cenizas ese cuerpo pestilente se volvía formar y cuando estaba listo se volvía a quemar, este era su castigo hasta la eternidad.
pasábamos y veíamos quemarse y reconstruirse a muchos cuerpos , vimos héroes de batalla y yo me preguntaba que habrán hecho para merecer ser quemados vivos. Una bola de fuego bajo a nuestro costado y vi como una y mas veces el cuerpo de ese hombre se quemaba y se reconstruia a la vez.
Nosotros íbamos caminando y una mano que se desasía y volvía a reconstruir me toca el brazo - y me dice alto, yo soy Ulises el héroe de la guerra en Troya, el aventurero que navego mas allá de las columnas de Hércules yo que tengo en mi memoria muchas proesas estoy aquí quemándome y reconstruyendome a cada momento.
Luego en medios de gritos por la quemacion dio estos versos:
¡ Oh muerte! que en mi tu posas toda tu venganza.
¡Oh muerte! que me destronaste de todas mis aventuras.
¡ Oh muerte! suplico a los pies de tu amo queme des tu piedad;
que el mundo me recuerde para la eternidad; que mi amada Penelope me de su perdón.
¡Oh muerte! espero tu redención.
El viejo lo miro y vi sus ojos rojos como se llenaban de intensidad, miro al desdichado Ulises y le dijo- tu Ulises Rey de Itaca; matador de cíclopes y héroe de guerra yo el príncipe de este lugar te voy a dar un regalo por ser buen esposo, un gran guerrero, un hombre valiente, audaz, honrado, decidido y muy ingenioso. No mereces estar aquí quemándote hacia la eternidad, te mereces ver la luz y alli te mandare. El viejo alzo sus manos y de pronto la bola de fuego que quemaba a Ulises desapareció ERES LIBRE ULISES, CAMINA HACIA LA LUZ.
Cuando Ulises tuvo dio el primer paso se paralizo y una luz muy brillante bajo de muy arriba, no podía caminar una especie de espejo impedía su andar. Una voz de mando le dijo ALTO.
Cada vez que se acercaba a nosotros el o su armadura brillaba mas y mas y el viejo le grito FUERA DE AQUÍ ESTAS EN MIS DOMINIOS, VETE MIGUEL... el desenvaino su espada de fuego y apunto al viejo diciéndole jamas hermano...